Cómo cerrar tus chakras

Este ejercicio es importante y muy útil para cerrar el paso a energías no deseadas y/o dañinas. Al cerrar tus chakras, sentirás una sensación de calma y paz interior. Cerrar tus chakras también te protegerá de las energías tanto de seres humanos desagradables como de entidades astrales, ya que ambas se adhieren, penetrando en los chakras. Cerrando tus chakras cuando estás en presencia de seres amenazantes, puedes evitar que la mayoría de las energías negativas entren y se adhieran a tu alma. Los chakras cerrados también pueden protegerte del vampirismo psíquico. Este ejercicio también puede ayudar a aquietar la mente cuando se hace antes de la meditación al vacío, ya que apaga una gran cantidad de ruido psíquico.

1. Comience por el chakra base. Visualiza tu chakra base como un remolino rojo de energía, con la punta hacia arriba como una pirámide. Visualiza puertas o puertas con cerraduras y ciérralas sobre el chakra, cerrando toda la luz. Puedes visualizar esto desde el frente del chakra, como mirando al chakra a través de una ventana.

2. Continúa así con cada uno de los chakras, hasta llegar al chakra de la coronilla.

Cuando todos los chakras estén cerrados, sentirá una sensación de paz y tranquilidad. Este ejercicio puede realizarse varias veces al día si desea bloquear estímulos externos no deseados y/o protegerse en un entorno negativo, como alrededor de cristianos u otras personas indeseables.

Es especialmente eficaz para las personas que son médiums naturales y empáticos, que absorben fácilmente la energía de quienes les rodean y de su entorno. Este ejercicio también es una ayuda para aquellos que se distraen fácilmente con estímulos externos.

Este es otro ejercicio que es necesario dominar, ya que se utiliza en una etapa avanzada del Magnum Opus.

Tus chakras volverán a abrirse por sí solos al cabo de un rato. Si sientes que necesitas abrirlos de inmediato, simplemente invierte el ejercicio anterior, abre las puertas y haz girar cada chakra varias veces.

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