El siguiente ritual es básicamente para principiantes y aquellos que son nuevos. Los Adeptos usan más técnicas que son avanzadas y en muchos casos, un ritual formal no es necesario. Para aquellos de nosotros que tenemos almas poderosas, sólo morar sobre el odiado con pensamientos de odio, es a menudo suficiente para traer maldiciones sobre esa persona. Visualizar al odiado con un aura gris, mientras se piensa en él, amplifica esto, pero de nuevo, tu alma debe ser lo suficientemente poderosa, lo que se logra a través de la consistente meditación. La fuerza de tu mente, aura, voluntad, concentración y odio determinan el resultado de cualquier ritual de destrucción. A menudo, uno o dos trabajos no son suficientes y los trabajos necesitan ser repetidos, especialmente durante una luna menguante [fase de llena a nueva].Cuando uno es nuevo, Satanás y sus Demonios a menudo conceden favores, pero la esencia del verdadero Satanismo es el auto-empoderamiento.
El Ritual de Destrucción comienza con el Ritual Estándar.
Después de invocar a los Cuatro Príncipes Coronados del Infierno, debes leer una oración que hayas escrito tú mismo con tus propias palabras pidiendo la destrucción de tu enemigo. Trabaja con un solo enemigo a la vez, a menos que tengas un acuerdo específico con un Demonio/una Diosa a cambio de servicios que ambos acordéis. Intentar castigar a más de un enemigo a la vez sólo debilitará tus energías, ya que se dispersarán. La energía debe ser dirigida como un láser para hacer su trabajo.
En la oración debe incluirse el nombre del ofensor, la severidad del castigo que deseas que te inflija, cómo te ofendió y tus sentimientos por haber sido víctima. También ayuda tener una pequeña posesión personal del ofensor o una foto suya, pero no es necesario.
Lee la oración en voz alta o en silencio para ti mismo, luego empuja la punta de tu athame a través del papel y enciéndelo con la llama de una de tus velas y colócalo en el cuenco ardiente.
El siguiente paso es extremadamente importante. Lo siguiente es un buen catártico que puede ser un salvavidas para la salud mental y el bienestar psicológico. Este es el paso de la meditación y se recomienda encarecidamente en los casos en los que hay una cantidad extrema de ira y odio reprimidos: Aquí es donde visualizas a la persona tan claramente como puedas y simplemente te desahogas hasta el agotamiento total. Este ritual se realiza mejor mientras el agresor duerme.
Visualiza claramente al agresor e infúndele todas las mutilaciones, heridas y dolor que puedas imaginar. Golpéalo, apuñálalo, tortúralo y atormentalo. Puedes recitar su nombre una y otra vez en tu mente. Libera todo tu odio e ira de la forma que desees. Sólo hazlo en tu mente. Algunas personas odian tanto a alguien que lloran - esto está bien, es una liberación catártica y muy intensamente emocional. Debes continuar una y otra vez hasta que estés literalmente exhausto.
Lo más importante aquí es mantener la concentración. También debes sentirte muy justificado. Cualquier lapsus en la concentración o los sentimientos que se arrastran en donde usted siente que no está 100% en el derecho y en su totalidad no sólo puede destruir un ritual de destrucción, pero puede ser peligroso.
Ahora, cierra el ritual dando gracias a Satán y a cualquier demonio que hayas invocado para que el infractor sea castigado como es debido. Toca la Campana, girando en el sentido de las agujas del reloj y di ¡SALVE SATÁN! En silencio o en voz alta.
Coge los restos quemados y puedes tirarlos por el retrete o deshacerte de ellos de alguna otra forma degradante.
ESTE PASO ES MUY IMPORTANTE:
Tómate
todo el tiempo que necesites y algo más. Acabas de tratar con una
energía muy negativa y destructiva. Deberías limpiar tu aura y tus
chakras. Sigue las instrucciones de este artículo, haciendo vibrar las palabras de poder 108 veces.
También debes seguir limpiando tu aura durante varios días después del trabajo. Las vibraciones aquí son esenciales.
Es importante que dejes atrás la experiencia y no te obsesiones con el delincuente ni te preocupes por anticiparte a su castigo. Deja que el trabajo haga su trabajo. Destierra al agresor y el incidente de tus pensamientos. Este trabajo puede durar un mes o más.
**El ritual puede ser variado, utilizando un MUÑECO
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