Formas de pensamiento errantes

El ejemplo más conocido de forma de pensamiento, es la casa “encantada”. Para que un lugar tenga una energía sobre él, tuvo lugar un acontecimiento muy emocional, normalmente una muerte violenta o un asesinato. El miedo, la ira y las emociones destructivas son tan poderosas que dejan tras de sí una esencia que la mayoría de la gente (incluso la persona normal) puede detectar. No hay mayor energía que la que se desprende en el momento de la muerte y, si ésta fue violenta, toda la zona puede apestar a ella durante siglos.

Las formas mentales crean una masa de energía. Son el resultado de emociones y pensamientos intensos. Su duración depende de la energía que se les dedique. El hecho de insistir continuamente en algo durante un periodo de tiempo da energía al pensamiento/emoción, que adquiere una forma propia. Cada individuo es diferente según la fuerza de su aura y sus pensamientos. Algunas personas nacen con una mente y un aura naturalmente fuertes debido a vidas anteriores. La mayoría de las personas tienen formas de pensamiento adheridas a su aura. Los resultados de las ensoñaciones, las fantasías, la ira, el odio, los deseos, etc., cuando se les considera repetidamente, forman formas mentales permanentes. Las formas mentales pueden ser positivas o negativas. En cualquier caso, pueden interferir en los procesos de pensamiento de una persona.

Cuando meditamos, aumentamos nuestra energía. Las formas mentales que tenemos se alimentan de esta energía. La meditación de poder es una especie de proceso de limpieza de la casa. Podemos sintonizar con ellas y eliminarlas, igual que podemos hacer con otras que se han adherido a nuestras almas. Eliminarlas nos traerá pensamientos más claros y paz mental. Es un proceso curativo.

Cómo alejar de su aura a personas y entidades no deseadas

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