Trance

Un trance profundo permite acceder al subconsciente y programarlo a nuestro antojo. El lado izquierdo activo del cerebro bloquea cualquier intento de acceder al lado derecho pasivo, donde se encuentra la sede del inconsciente. Esto es análogo a cortar la electricidad de una habitación o un edificio para arreglar la instalación eléctrica. El lado derecho del cerebro es donde podemos programar nuestra mente para manifestar lo que queremos en la realidad.

Entrar en estado de trance requiere práctica. Recuerda que cada uno de nosotros es individual y que a algunos les resultará más fácil que a otros. Lo importante es ser persistente y paciente con uno mismo. La persistencia y la constancia lo son todo aquí.

Es muy recomendable realizar ejercicios de respiración antes del trance, ya que esto calmará de forma natural el sistema nervioso.

1. Siéntate cómodamente. No te tumbes porque podrías quedarte dormido.

2. Inhale contando hasta seis, mantenga la respiración contando hasta seis y exhale contando hasta seis. Haz esta respiración hasta que estés completamente relajado. Lo ideal es que ya no puedas sentir tu cuerpo.

3. Imagina que estás bajando una escalera en la oscuridad. No visualices la escalera; imagina que puedes sentir cómo lo haces. Al exhalar, siente que bajas uno o dos peldaños. Al inhalar, siente que te mantienes quieto en la escalera.

4. Ahora, suelta la escalera y cae libremente hacia atrás. Si te mareas o te desorientas, lleva tu atención a la parte delantera de tu cuerpo y esto se detendrá. Este efecto de caída mental, combinado con una profunda relajación y calma mental, hará que entres en estado de trance.

Lo que se necesita es un efecto de caída mental dentro de tu mente. Esto cambia el nivel de actividad de las ondas cerebrales del nivel despierto (Beta) al nivel dormido (Alfa) o al nivel de sueño profundo (Theta). Una vez que tu nivel de actividad de ondas cerebrales alcance el Alfa entrarás en trance. Una vez que tengas la sensación de pesadez, detén el ejercicio de caída mental. Si no te gusta la escalera, imagina que estás en un ascensor, siente que caes al exhalar y que te sostienes al inhalar. O imagina que eres una pluma, siéntete flotar hacia abajo al exhalar y mantente quieto al inhalar. Necesitas un efecto de caída mental para bajar el nivel de actividad de las ondas cerebrales.

5. Sigue haciendo esto durante el tiempo que sea necesario. El tiempo que tardes en entrar en trance variará en función de tu experiencia con la relajación profunda y la calma mental.

Como se siente un trance: Todo se vuelve más silencioso y sientes que estás en un lugar mucho más grande. Se siente un ligero zumbido en el cuerpo. Todo parece diferente. Es como si te pusieras una caja de cartón sobre la cabeza en la oscuridad, puedes sentir cómo cambia la atmósfera. Es como si todo se volviera borroso o ligeramente borroso. Durante el trance, los ruidos agudos son dolorosos.

6. Para salir del trance: Concéntrate en mover los dedos de las manos o de los pies. Una vez que puedas mover un dedo de la mano o del pie, flexiona las manos, mueve los brazos, sacude la cabeza, es decir, reanima tu cuerpo; y levántate y camina durante unos minutos.

Para qué sirve este ejercicio:

Para avanzar en el poder psíquico, debemos entrenar nuestra mente. Cuando estamos en estado de trance, nuestras ondas cerebrales se ralentizan considerablemente. El cerebro tiene dos lados: el lado izquierdo masculino, lógico e intelectual, y el lado derecho femenino, creativo e intuitivo. El lado derecho es la sede del subconsciente. Esta es el área de la mente que está abierta a la sugestión y la programación y el asiento de nuestro poder astral. Cuando el lado izquierdo de nuestro cerebro está activo para pensar, no podemos acceder al lado derecho. Los estados de trance desconectan el lado izquierdo para que podamos acceder y programar el lado derecho (subconsciente).

Se necesita entrenamiento para poder inducir un estado de trance profundo. Los estados de trance profundo no siempre son necesarios, pero para trabajos específicos son muy importantes. Una vez que entrenamos nuestra mente para entrar en un trance cada vez más profundo, esto se vuelve cada vez más fácil y toma cada vez menos tiempo a medida que nos volvemos adeptos. La mente es como un músculo y, para la mayoría de la gente, este ejercicio será una introducción a una parte de la mente a la que nunca se ha accedido antes.

Es MUY importante que nunca te asustes al salir de un estado de trance, especialmente de uno profundo, así que asegúrate de que estás en una habitación o zona en la que estás solo y con el teléfono apagado. Si te sobresaltan y te sacan del trance de la manera equivocada, puede ser extremadamente doloroso y el dolor puede durar días, especialmente si estás haciendo trabajo energético en este estado.

Es normal que en estado de trance cualquier sonido sea muy doloroso. Esto se debe a que en este estado, nuestros sentidos están extremadamente agudizados.

Un adepto puede entrar en un trance profundo en cuestión de segundos a voluntad. Para terminar, no es necesario entrar siempre en trance profundo para trabajar con la mente. El estado de trance sirve para entrenar la mente. Con trabajos muy importantes o difíciles, a menudo es necesario un trance profundo.

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